Una derrota previsible, en el momento menos indicado
Boca dejo pasar una chance inmejorable de empezar a definir el campeonato a su favor. Jugo igual que siempre, pero el resultado no fue el esperado. Conoce las razones.
El año futbolístico de la Primera División masculina de Boca tiene las convulsiones propias de las decisiones de su dirigencia: cuando los tiempos dispuestos para el progreso de un proceso deportivo no son los necesarios se corren riesgos importantes que pueden tener consecuencias como las evidenciadas en el partido con Newell’s.
Hacer del resultado un fin en si mismo y no la consecuencia de un funcionamiento definido y estable mas alla de los nombres es una permanente ruleta rusa en la que la bala puede salir en cualquier momento.
Evidentemente, en el encuentro frente a la Lepra Rosarina salieron dos balas que impactaron directamente en las aspiraciones de campeonato de Boca, aunque el pronostico sea de caracter reservado: el verdadero diagnosito se vera en proximo miercoles en La Plata, cuando Gimnasia y Boca intenten completar los 81 minutos restantes del malogrado encuentro del jueves 6 de octubre.
Los numeros de Boca en el campeonato son vedaderamente impactantes: esta puntero por una unidad de diferencia sobre Racing, producto de 15 victorias, 3 empates y 7 derrotas. Estuvo invicto en los anteriores 13 juegos, con 10 victorias – superclasico incluido – y 3 empates – Racing, Rosario Central y Huracan -.
Ahora hay que esperar el partido ante Gimnasia, esperando que hoy Ateltico Tucuman y mañana Racing sumen la menor cantidad de puntos posibles.
Boca debe poner piloto automatico y seguir en la tesitura imperante. No tiene tiempo de cambios drasticos.
