Lo aplastó
Boca derrotó a River, con mucha claridad, 2 a 0 a River. Exequiel Zeballos, con un gol y una asistencia, fue la gran figura en la Bombonera. Los xeneizes aseguraron su pasaporte para la Libertadores y puso en peligro la clasificación de unos millonarios en crisis total. El otro gol fue de Merentiel.
Exequiel Zeballos, con su dulce presente, representaba la principal ventaja que le sacaba Boca a River en la previa de este Superclásico en el que los dos gigantes se jugaban mucho. Y el Changuito certificó la percepción previa con un partido consagratorio. Voló por la Bombonera sin que ningún defensor millonario lo pudiera contener y le dio dos mazazos brutales al ya castigado equipo de Marcelo Gallardo.
Zeballos, con una definición propia, fue la clave para destrabar el clásico cuando nada pasaba, en el cierre del primer tiempo. El Changuito, con un desborde brutal coronado con asistencia precisa, resultó crucial para enterrar a River cuando casi nada había sucedido en una segunda etapa que recién se iniciaba. Y después siguió desequilibrando…
La consagración del Changuito
A sus 23 años, por fin parece que el Changuito Zeballos confirma todo lo bueno que viene anunciando hace un lustro y que por lesiones y algunos otros obstáculos no lograba redondear. Es desborde, gambeta, gol, atrevimiento, frescura, todo eso que escasea en la liga argentina. Boca lo disfrutó a pleno. River lo recibió como la peor de las pesadillas.
Así, con Zeballos en estado de gracia, Boca se afirmó bien arriba en la Zona A del Clausura y se clasificó a la fase de grupos de la próxima Libertadores, llenando todavía de más dudas a este River en crisis, que tiene en peligro hasta su pasaporte al repechaje del máximo certamen continental, un premio que deberá buscar de visitante contra el duro Vélez en el última capítulo de esta fase regular del torneo doméstico.